jueves, 27 de abril de 2017

BAR EL SUR (Ferrol)


El pasado jueves santo fui a cenar al "Bar Sur" de Ferrol, un clásico de toda la vida que se encuentra en la Calle Magdalena, un establecimiento en cuya carta podemos encontrar numerosas tapas y raciones entre las que destacan la oreja, el morro, las tripas, el pulpo y los chocos entre otras cosas, y que se caracteriza por no usar fritos en su comida. Para quien no lo conozca, el sitio no es muy grande y el comedor se comparte con la barra donde pueden dar cabida a unas 20 personas aproximadamente, disponen de una pequeña terraza en su parte delantera con dos o tres mesas y también de un pequeño comedor privado al fondo del local que juntándose un poco pueden caber hasta 10 personas.


En esta ocasión fuimos diez personas, todos adultos, por supuesto con la mesa reservada desde hacía varios días, concretamente el comedor privado, y también por recomendación de la dueña (por cierto muy atenta en todo momento) tenía apalabrado más o menos lo que íbamos a comer, ya que por estas fechas Ferrol esta de bote en bote y lo que no querían es que no tuviésemos comida a causa de la gran afluencia de gente pudieran tener, algo de agradecer. Para beber pedimos aguas, cañas y algunos vinos, y de comer pedimos varias raciones para compartir y que fue lo siguiente:

2 Raciones de Pulo a la Feria con cachelos


1 Ración de Chorizos a la Sidra


2 Raciones de Chipirones en su Tinta


2 Raciones de Chocos en Salsa, troceados para compartir y acompañados con 
unas patatas cocidas, de lo mejor....


2 Raciones  de Criollos en salsa, que estaban especialmente buenos, 
con un poco de cebolla pochada.


1 Ración de Carne en Salsa, un estilo al Raxo pero acompañado de una salsa de 
tipo estofado y acompañado con unas patatas cocidas


Además de todo esto, yo me pedí, como no podía dejar pasar, una tapa de Tripas, una de las especialidades de la casa y que estaban realmente buenas. Terminamos con un plato de "Queso con Membrillo" para compartir entre todos, invitados por la casa y puesto que ya era muy tarde, decidimos tomar los cafés en Bonilla y hacer allí un poco de sobremesa ya que éramos los únicos que quedábamos en el local y aún les quedaba recoger todo y preparar para la jornada del día siguiente.

Había estado alguna vez en el Sur tomando algo en la barra ya que las veces que fui sin encarga, no pude cenar por estar lleno, y tenía muchas ganas probar su gastronomía, la verdad me gustó y creo que al resto de los comensales también, una comida rica, abundante, la atención buena entendiendo que estaban a tope de gente tanto cenando como en la barra, el precio asequible, un sitio al que se puede volver.

Saludos.

martes, 11 de abril de 2017

LAS NUEVAS BODEGAS DE FAJARDO (Ferrol)


Hace un par de semanas que fui a comer a "Las Nuevas Bodegas de Fajardo" un establecimiento con mucha solera que lleva abierto desde el año 1942 y cuando entramos en el nos traslada a las bodegas tradicionales de antaño donde podemos chatear tomándonos unas tazas además de disponer de una amplia selección de tapas entre las que destacan el pulpo y los calamares.


El local se encuentra situado en la Carretera Castilla Nº180, muy cerca del colegio "Mercedarias", dispone de dos entradas, la principal a la que accedes a la zona de la barra orientada al chateo y la otra donde accedes directamente al comedor, que al igual que la zona de la barra esta con una decoración tradicional simulando un merendero, muy original.

Nosotros en esta comida éramos tres personas, servidor, mi amigo Juan Antonio Peña y nuestro colaborador el Sr.Gaveiras y optamos por pedir varias cosas para compartir, "Zamburiñas a la plancha", tomamos la media ración que les quedaba, una pena porque estaban muy buenas tanto en su preparación como de tamaño, por supuesto el "Pulpo" una de las especialidades de este sitio y con una fama merecida, estaba muy bueno, seguimos con unos "Chipirones fritos" sin desmerecer lo anterior y para terminar pedimos media ración de "Raxo" que también estaba bueno, las raciones muy generosas, llegó perfectamente para dejar un hueco para los postres que fueron "Semifrío de Queso con Membrillo" algo que no había probado nunca y me dejó sorprendido ya que estaba buenísimo, y una tarta de chocolate, que también estaba muy buena. Todo esto, más un par cervezas, agua grande y cafés, pagamos 47€.






La verdad me habían hablado en numerosas ocasiones de este sitio y había oído muchas cosas pero mi experiencia fue para repetir, la comida estaba muy buena además de servir unas raciones generosas, la atención formidable un personal muy agradable y de precio genial, si duda un sitio recomendable y al que espero volver.

Saludos.